PEDRO I el Justiciero o el Cruel (Burgos 1334 – Montiel, Ciudad Real 1369) Rey de
Castilla y León (1350-1369). Heredó el trono de su padre Alfonso XI de
Castilla. Durante los primeros años de su reinado la política castellana estuvo
dirigida por el valido Juan Alonso de Alburquerque, que favoreció la alianza
con Francia en la guerra de los Cien
Años y concertó el matrimonio del rey con la infanta francesa Blanca de Borbón.
En 1353 don Pedro se liberó de su tutela, abandonó a la reina por su favorita
María de Padilla y decidió intervenir en las luchas de linajes que desgarraban
el reino. Frente a él se levantó el bando nobiliario dirigido por sus hermanos
bastardos, los Trastámara, lo que originó una guerra civil en Castilla en la
que intervinieron: Inglaterra a favor de Don Pedro, y Francia, en apoyo del
pretendiente Enrique de Tratámara. En la batalla de Montiel el rey fue atraído
con engaño a la tienda del condestable francés Bertrand Duguesclin, donde fue
asesinado.
ENRIQUE II el de las Mercedes (Sevilla 1333 – Santo Domingo de la Calzada, La Rioja 1379). Rey de Castilla y León (1369 – 1379). Hijo bastardo del rey Alfonso XI de Castilla y de Leonor de Guzmán, hermanastro de Pedro I y primogénito de los Trastámara, desató la guerra civil castellana apoyado por un sector de la nobleza y con el auxilio de Francia. Su victoria de 1369 significó el triunfo de la nobleza terrateniente frente a la burguesía comerciante y limitó la autoridad real en beneficio de los grandes linajes castellanos.
ALVARO DE LUNA (Cañete, Cuenca h. 1390 – Valladolid 1453)
Condestable de Castilla. Fue valido de Juan II y quien dirigió el gobierno de
Castilla durante todo su reinado. Sufrió la hostilidad permanente de los
infantes de Aragón, que provocaron su destierro desde 1427 hasta 1430. Combatió
a los musulmanes, a los que venció en la batalla de la Higueruela (1431). Fue
desterrado nuevamente a Escalona en 1439, pero derrotó a los nobles hostiles en
Olmedo (1445) y recuperó el gobierno de Castilla. Acumuló grandes beneficios,
lo que acentuó el odio de sus enemigos que finalmente, lograron del rey la
firma de su pena de muerte. Fue degollado públicamente en Valladolid.
ENRIQUE IV el Impotente (Valladolid 1425 – Madrid 1474) Rey de
Castilla y León. Hijo de Juan II, débil de carácter, fue dominado por la
nobleza. Delegó las funciones de gobierno en sus validos Juan Pacheco y Beltrán
de la Cueva. El bando que apoyaba la candidatura al trono de su hermana Isabel hizo
circular el rumor de su impotencia, atribuyendo la paternidad de la heredera
Juana (apodada la Beltraneja) a Beltrán de la Cueva. La nobleza destituyó a
Enrique en Ávila y nombró rey al infante
Alfonso en 1465 ((farsa de Ávila), que murió poco después. Isabel obtuvo en Guisando el
reconocimiento de su derecho a la herencia dinástica (1468), pero dos años
después Enrique IV proclamó heredera del trono a Juana la Beltraneja. A la
muerte del rey estalló la guerra civil en Castilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario